LAS APARIENCIAS SÍ IMPORTAN
"Quieras o no, ya estás mandando un mensaje al mundo sobre quién eres"
Seguro que antes de dejar la puerta de tu casa atrás te miras un par de veces en el espejo. Compruebas que tu ropa, pelo y ahora, mascarilla brillen con estilo. Y seguro que no las combinas igual todos los días.
Por ejemplo, no te vistes igual para ir a una entrevista de trabajo como para la fiesta de tu pueblo. ¿Y por qué?
Te doy un minuto de reflexión.
¡Pues porque no quieres causar la misma impresión! En la entrevista de trabajo quieres transmitir seguridad y profesionalidad, mientras que en la fiesta de tu pueblo quizá solo quieras echarle la caña al vecino/a de al lado.
Y eso lo hacemos porque las apariencias importan, porque hablan sobre quiénes somos, sobre nuestros valores y filosofía de vida. Los mismo sucede con la imagen de tu empresa/negocio.
A través de colores y formas puedes transmitir los valores de tu negocio. Quieras o no, estás mandando un mensaje al mundo sobre quién eres, qué ofreces y qué te hace diferente. Es tu decisión tomar el control sobre lo que ya estás comunicando y hacerte así un hueco en la lista de marcas favoritas de tu consumidor.
Porque un tick, no es solo un tick. Es autosuperación, deporte, esfuerzo. Una onda no es solo una onda, es felicidad, frescura, vida. Y una manzana no es solo una manzana. Es tecnología, creatividad y diseño. ¿Te imaginas conseguir esto con tu marca?
Si bien es cierto que en la actualidad los consumidores son menos fieles, lograr posicionarte como marca preferente en su mente sumará un plus en el momento de decisión de compra, especialmente si tu imagen va de la mano de connotaciones positivas.
Primer paso, una imagen coherente
Para lograr este impacto es necesaria la coherencia. El punto de partida es la historia y valores de tu negocio. ¿Quién eres? ¿De dónde vienes? ¿Qué quieres conseguir? ¿Qué ofreces? Y así, paso a paso, construimos una imagen potente, que refleje el alma de tu negocio, elevando al cubo su valor intangible y convirtiéndolo en marca.
En este punto, sacamos polvo a una herramienta que nos servirá de guía a lo largo de este proceso: el libro de identidad corporativa. En él se le dan respuestas a todas estas preguntas de forma visual. Recoge tus colores y su porqué, tus tipografías y sus aplicaciones. Es el cimiento de tu marca.
En nuestro porfolio podrás encontrar ejemplos de libros de identidad corporativa.
¿Lo necesito?
Quieras o no, tu marca ya está mandando un mensaje, por lo que la respuesta es sí. Multinacionales, PYMES, tiendas de barrio, autónomos… todos tenemos una reputación y una imagen que necesitamos cuidar.
Tu imagen de marca es simplemente una proyección controlada sobre lo que eres y lo que puedes ofrecer. La decisión de tomar el control sobre ella es tuya.